SE CIERRA UNA VENTANA DE LA CULTURA
Una librería, L a República de las Letras , anuncia su cierre para final de mayo. Su apertura hace ya diez años supuso una n ovedad. S u hermoso nombre ya lo era y además de libros ofrecía también un servicio de cafetería y bar, se podían hojear los libros al mismo tiempo que se podía tomar un café o un refresco. También se prodigó en la presentación de libros, recuerdo que aquí estuvo Josep Borrell con su último libro. Es decir, añadió una serie de atractivos que ampliaban el concepto tradicional que teníamos de una tienda de libros. Hace pocos días se publicaba también el cierre en Salamanca de una librería tradicional para hacer pisos turísticos. ¿Cuántas más se cerrarán sin que tengamos conocimiento de ello? No puedo evitar sentir una sensación de tristeza y fracaso cuando cierra una librería. Doy por sentado que el interés por la lectura de libros nunca ha sido una preferencia para la mayoría de la gente. A esto se une el cambio que ha sufrido una sociedad ...